Iniciarse en la realidad virtual en educación con unas gafas de cartón
La realidad virtual ha llegado para quedarse, y cada vez son más los fabricantes y empresas que apuestan por esta nueva tecnología… tanto a nivel comercial como también en educación, donde ya existen algunas opciones (sobre medicina, sobre el universo, omucho más) para aprovechar la inmersión que nos permiten unas buenas gafas.
Pero el problema es el de siempre: una tecnología muy innovadora como trae consigo un precio un tanto elevado, sobre todo en sus primeros años de vida. Sin embargo, ya empieza a masificarse una alternativa mucho más económica basada en un pequeño trozo de cartón y que es el inicio perfecto para empezar a aprovechar la realidad virtual en el aula, a todos los niveles y con todos sus beneficios.
Cardboard, las gafas de cartón para realidad virtual
Empresas como Samsung, Valve/HTC o Sony, entre muchas otras, ya tienen sus productos comerciales. Generalmente enfocados al mundo de los videojuegos, son dispositivos muy técnicos y que esconden mucha técnica, así como componentes que generalmente tienen un alto precio.
Sin embargo, Google comenzó a mover su pieza en junio de 2014. Muchos se tomaron a broma el lanzamiento, llamado Cardboard: unas gafas de realidad virtual de cartón, cuyo coste era de unos pocos euros en vez de los —generalmente— varios cientos de las alternativas de otros fabricantes.
Tan básicas como que tendrás que montarlas tú mismo, siguiendo unas sencillas instrucciones que implican unos cuantos pliegues manuales y poco más. Sin tornillería ni pegamento, simplemente con algunos adhesivos incluidos y un poco de velcro conseguiremos tener en unos pocos minutos unas gafas funcionales y completas.
Tú pones el móvil
El único requisito de estas gafas es que, al contrario de otros modelos, no disponen de pequeñas pantallas en las que reproducir el contenido. Es necesario utilizar un smartphone a modo de reproductor; las gafas tienen un pequeño espacio en la parte frontal donde colocarlo de forma segura.
El que las Cardboard necesiten de un smartphone para funcionar reduce los costes y hace que aprovechemos ese otro dispositivo que todos tenemos en nuestro bolsillo. Además,abre un mundo de posibilidades aprovechando que Google, en este caso, ha liberado la documentación necesaria para que desarrolladores por todo el mundo creen sus propias aplicaciones.
La mayoría de ellas están concentradas en la aplicación de Cardboard de Google, disponible en Android y en iOS y que es un buen punto de partida para descargar algunas demos y presentaciones, muchas de ellas muy atractivas para usar en educación. Las cifras de esta plataforma son muy elevadas, demostrando el interés que el público está poniendo por esta nueva tecnología que apenas está empezando a despegar.
Dónde conseguir unas gafas de cartón para realidad virtual
Si todo esto te está interesando y quieres empezar a dar tus primeros pasos en la realidad virtual haciéndote con unas gafas de cartón para realidad virtual, tienes muchas vías para comenzar.
En la página oficial de las Cardboard nos ofrecen los primeros indicios sobre los que seguir investigando. Existen muchos visores más o menos económicos entre los que listan ahí; también ofrecen las instrucciones para crear desde cero tus propias gafas de realidad virtual con algo de cartón, imanes, gomas, velcro y unas lentes. Perfecto para un día de bricolaje en clase.
Sin embargo, otras opciones son igualmente funcionales y mucho más económicas… o, al menos, más sencillas de llevar a cabo. En Amazon por ejemplo nos encontramos conalgunos modelos por 2 euros (más 2,99 de envío), y si buscamos en páginas tipo Aliexpress o TinyDeal (o en eBay en determinados distribuidores) llegaremos a precios aún más baratos, aunque con plazos de envío muy superiores.
A día de hoy encontraremos opciones para todos los gustos, desde menos de dos euros hasta varios cientos. Y todo esto porque la realidad virtual ya es una completa realidad.
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